domingo, 13 de abril de 2008

Cañon del Colca: Reino de los Condores (Arequipa - Peru)

(26 al 29 de Julio '03)

El valle del Colca es una impresionante formación geológica producida por la erosión del río, en un proceso que duro miles de años. El cañón tiene su parte mas estrecha, a partir de la Cruz del Cóndor; su máxima profundidad ha sido calculada en 3680 metros de altura. A parte del cañón también se puede apreciar un espectacular conjunto de andenes, los cuales fueron construidos por las etnias Collaguas y Cabanas, quienes habitaron la región entre los años 900 a 1400 DC y que aun hoy en dia se continuan usando para la agricultura.

La mañana del lunes 28 de julio, un grupo de nueve personas abordamos la camioneta que nos llevaría hasta el pueblo de Chivay, puerta de entrada al Cañón del Colca, hogar y reino del majestuoso Cóndor, amo y señor de los Andes. El cañón del Colca era considerado el mas profundo del mundo, hasta que en 1995 se descubrió que el mas profundo era el cañón de Cotahuasi, también ubicado en Arequipa. El cañón del Colca tiene aproximadamente 50 Km de extensión y va desde Chivay hasta Cabanaconde. Todos los pueblos ubicados a lo largo del cañón se encuentran por encima de los 3000 msnm.

Eran las nueve de la mañana cuando dejamos atrás la Ciudad Blanca de Arequipa para tomar la carretera hacia Yura y Patahuasi. Durante este tramo de nuestro viaje, nos detenemos en Pampa Cañahuas, ubicada en la Reserva de Salinas y Aguada Blanca para poder apreciar un grupo de alpacas pastando libremente por la planicie; seguimos nuestro camino y nos detenemos en un pequeño restaurante en Patahuasi, donde todos los visitantes que se dirigen al Cañón del Colca se detienen para disfrutar de su mate de coca. En este punto la carretera se bifurca en dos, a la derecha se va hacia Puno por una carretera completamente nueva y asfaltada y hacia la izquierda a Sumbay, Patapampa y Chivay por una carretera que se encuentra afirmado y asfaltada por partes. La distancia desde Arequipa hasta Chivay es de aproximadamente 165 km y dura una 4 horas, tomando en cuenta todas las paradas que realizamos ya que íbamos en un tour contratado. En este tramo de la ruta nos cruzamos con algunos viajeros en moto que se dirigían hacia Puno.

El punto mas alto de la carretera se encuentra en Patapampa (4700 msnm) aproximadamente, este lugar también es conocido como el Mirador de Los Andes, este lugar es parada obligatoria para todo el que se dirige a Chivay; desde aquí se puede apreciar los volcanes Misti, Chachani, Sabancaya y Ampato (donde se descubrió la momia Juanita o Dama de Ampato). Acá también se encuentran gran cantidad de apachetas, que son pequeñas torres hechas con piedras que se hacen como ofrenda a la tierra o a los Apus o montañas sagradas que era el lugar donde los antiguos pobladores creían era el hogar de sus dioses.

Por fin llegamos al pueblo de Chivay (3633 msnm) y fuimos directamente al restaurante para almorzar ya que era la una de la tarde, era un restaurante típico, así que había que comer comida típica como bistec de alpaca, muy sabroso dicho sea de paso. Luego del almuerzo nos fuimos a nuestro hospedaje a descansar y a eso de las cinco de la tarde, la movilidad nos recogió para ir a los baños termales de La Calera a unos 10 minutos de Chivay.

El ingreso a estos baños es de 5 soles; se puede disfrutar de una piscina al aire libre y otra bajo techo, la temperatura de las aguas es de aproximadamente 37 grados. En este lugar nos quedamos hasta cerca de las 8 de la noche; decidimos tomar un baño en la piscina que se encontraba al aire libre y tener como techo a un hermoso cielo completamente estrellado, relajándonos y disfrutando de un rico pisco sour o una piña colada, mientras nos encontrábamos sumergidos hasta el cuello, ya que el viento que hacia era muy frío.

Saliendo de La Calera, retornamos al hospedaje a dejar nuestras cosas y acordamos con la movilidad en que nos recogía en 40 minutos para ir a cenar, pasaron los 40 minutos y vino la camioneta, pero no todos estaban presentes, así que los esperamos. El tiempo iba pasando, eran las 9 de la noche y no salían, la gente se impacientaba y el estomago reclamaba alimento, por fin luego de 20 minutos mas salieron los que faltaban, preguntamos cuál fue el motivo del retraso y la respuesta fue que una de las chicas del grupo se había quedado atrapada en la torre del castillo (léase el baño de su habitación), el problema fue que la cerradura de la puerta se malogro y no había forma de salir, se hizo de todo para poder rescatar a la doncella en peligro, hasta que un hidalgo caballero con reluciente armadura rompió la puerta de una patada y pudo liberar a la doncella de su prisión.

Luego de superado el incidente, nos dirigimos a cenar y a disfrutar de un show folclórico, pero no nos quedamos hasta muy tarde, ya que había que acostarse temprano porque al día siguiente nos teníamos que levantar a las 5 am para poder llegar entre las 7 y las 8 de la mañana al mirador de La Cruz del Cóndor y poder apreciar a esta inmensa ave que mide entre 2 y 3 metros de envergadura, en su habitad natural. Las noches son un poco frías, pero con una buena bolsa de dormir no se siente el frío.

Desayunamos a las 5:30 am, subimos a la camioneta y todo el grupo salió rumbo al cañón. La distancia recorrida hasta La Cruz del Cóndor es de aproximadamente 42 km y se lo recorre en 2 horas, ya que el camino es afirmado y se hacen algunas paradas.

El primer poblado por el que pasamos en Yanque, luego el desvío a Achoma, Maca y nos detenemos en el Mirador de Choquetico, desde este punto se divisa el poblado de Lari al otro lado del cañón, además se puede ver una piedra no muy grande labrada por los antiguos pobladores, en la que se aprecia lo que vendría ha ser una representación de los andenes que hay en el lugar. También se puede observar un conjunto de tumbas preincas a la mitad de una inmensa pared vertical; aquí surge la pregunta, ¿Cómo hicieron los antiguos pobladores para poder llegar a tales alturas y colocar a sus muertos? o ¿Por qué lo hicieron?, la respuesta a la segunda pregunta quizás sea porque después de la muerte querían estar mas cerca de sus dioses, pero la respuesta a la primera pregunta aun sigue siendo un misterio.

Continuamos nuestro camino hacia la Cruz del Cóndor, a donde llegamos a las 8 de la mañana. Este lugar es el mas concurrido por los turistas para poder apreciar a los cóndores, pero algunos pobladores de la zona se refieren a este mirador como Chaglla (vocablo quechua), ya que fueron los españoles, la cultura de la cruz, la que acabo con la cultura del cóndor. Si uno quiere apreciar el fondo del cañón, este mirador no es el mejor lugar, ya que habría que acercase demasiado al borde del cañón, según algunos guías, el mejor lugar para poder admirar mejor el cañón en si, es decir en perspectiva, es el mirador de Tapay. Cuando llegamos ya había gran cantidad de turistas esperando que esta magnifica ave alzara vuelo desde sus nidos ubicados en las paredes del cañón. Al principio parecía que no querían volar para nosotros, pero luego de algunos minutos apareció uno, luego el segundo, el tercer cóndor y pronto eran cerca de diez de estos magnificas aves las que se encontraban volando por sobre nuestras cabezas; luego comenzaron a descender sobre el cañón; era un espectáculo increíble. El mejor momento para poder ver a los cóndores es entre las 8 y las 10 de la mañana, ya que luego se pierden en la profundidad del cañón.

Luego de permanecer en la Cruz del Cóndor por espacio de poco mas de una hora, emprendimos el retorno a Chivay. Realizamos una parada en Antahuilque, justo enfrente de este punto se puede divisar el poblado de Madrigal, uno de los muchos poblados del cañón. Luego nos detuvimos nuevamente en Choquetico para poder apreciar la inmensidad el cañón por ultima vez, así como la andenería inca y preinca que aun resisten a los embates del tiempo y que son usados por los actuales pobladores del cañón para sus cultivos.

Luego proseguimos rumbo al poblado de Maca, el cual se encuentra ubicado en las faldas del volcán Sabancaya y del nevado Hualca Hualca. Este pueblo fue epicentro de un terremoto en 1991 y como consecuencia de ello una de las torres de su iglesia (Santa Ana) se vino abajo; esta iglesia fue construida en 1812. Si uno observa los campos de cultivos, aun se pueden ver las cicatrices causadas por el terremoto. Aquí pudimos ver una pequeña procesión en honor a San Antonio de Padua, de la cual también formaron parte algunos turistas, ya sea cargando el anda o llevando el incienso.

Arribamos a Chivay al medio día y nos fuimos directamente a almorzar para luego ir a nuestro hospedaje, recoger las mochilas y emprender el retorno a Arequipa, a donde llegamos a las 5 de la tarde.
Para ver mas fotos ir a la siguiente direccion:

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1 Comments:

Blogger Monica said...

Es muy similar a la vistas que tenia cuando estuve en uno de los hoteles cinco estrellas en guadalajara!! En que epoca del año me recomiendan ir??

martes, marzo 08, 2011 10:18:00 a.m.  

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